BOSCO VERTICALE: EL PRIMER ‘BOSQUE VERTICAL’ DEL MUNDO
Su creador, Stefano Boeri, comienza este proyecto para luchar contra la polución que ataca la ciudad de Milán, considerada una de las más contaminadas. El resultado son dos torres residenciales de 27 pisos de 111 y 80 metros de altura cada una, que integran una frondosa vegetación en su fachada a las afueras del barrio de Isola.
Ubicado en una superficie de 40.000 metros y como proceso de reforestación metropolitana, contará en su fachada con un total de 900 árboles, 5.000 arbustos y 11.000 plantas. Éstas permitirán una calidad óptima de vida a sus habitantes ya que además de producir oxígeno al edificio, en verano evitarán la incidencia solar y en invierno mitigarán el frío y el viento. Además, proporcionan a las casas un perfecto insonorizado ya que frenan la contaminación acústica y protegen de las partículas de polvo generadas en la calle.
Los edificios incorporan un sistema que optimiza, recupera y produce energía. Ayudando a la creación de un microclima y en el filtrado de las partículas de polvo contenido en el entorno urbano. La diversidad de las plantas y sus características producen humedad, absorben partículas de CO2 y polvo, produciendo oxígeno y protegen de la radiación y la contaminación acústica, la mejora de la calidad de los espacios de vida y ahorro de energía. Riego de plantas se produce en buena medida a través del filtrado y la reutilización de las aguas grises producidas por el edificio. Sistemas de energía eólica y fotovoltaica, además, contribuirá, junto con el microclima mencionado para aumentar el grado de autosuficiencia energética de las dos torres. La gestión y el mantenimiento de la vegetación de los edificios será centralizado y confiado a un organismo con un mostrador de la oficina abierta al público.
El complejo está dotado de sistemas de producción de energía eólica y fotovoltaica que ayuda a la autosuficiencia energética de las torres. Incluso la red de riego es ‘verde': proviene de las aguas grises del edificio ahorrando a los clientes los costes que se derivan de este proceso.
El proyecto, que ha costado 65 millones de euros, está actualmente en construcción y, aunque sólo se pueden ver las imágenes de la fachada, se prevé que estará listo para entrar a vivir pronto.