El perejil es una de las especies más utilizadas en la cocina, no solo para preparar una amplia variedad de platillos, sino también para embellecerlos. De acuerdo con la Asociación Nacional de Jardineríade EEUU, es una hierba aromática rica en hierro y vitaminas A y C, además de ser una gran aliada contra el mal aliento. Aprende cómo cuidarla desde el jardín, ¡hasta tu mesa!
Al cultivarlo
Esta hierba crecerá mejor si la cultivas en un lugar donde reciba directamente la luz del sol, de 6 a 8 horas al día, aunque también podría desarrollarse en espacios con un poco de sombra, informa la Universidad de Minnesota. Asegúrate de que el suelo donde plantes el perejil esté bien drenado y sea rico en materia orgánica, recomienda la institución.
Para ayudar a acelerar el proceso de germinación, que suele demorar entre 2 y 5 semanas, la universidad aconseja utilizar semillas frescas, y ponerlas en remojo en agua tibia hasta 24 horas antes de la siembra.
Por su parte, la Asociación Nacional de Jardinería sugiere sembrar el perejil dentro de las dos a tres semanas previas a la última helada de la primavera. La separación entre cada planta deberá ser de entre 6 y 10 pulgadas (15 y 25cm).
Cuidados en el jardín
El perejil se caracteriza por ser una hierba muy activa una vez que comienza a crecer, avisa el portalDo It Yourself. Para mantenerla en buen estado y evitar que invada el espacio de otras plantas, deberías podarla. El sitio mencionado aporta los siguientes tips:
- Revisa si hay brotes de flores en mal estado. En caso de que los encuentres, córtalos, para evitar que las semillas se esparzan por toda tu huerta. Utiliza tijeras filosas para podar el tallo de la flor desde su base.
- Deshazte del follaje enfermo. Identifica las hojas amarillentas, manchadas o dañadas por los insectos, y córtalas en cuanto aparezcan.
- Pódale 1/3 de pulgada (8 mm) de la parte superior, para que no crezca demasiado en altura y mantenga un aspecto agradable.
- Abona la tierra. Aplícale compost en la superficie para mejorar la humedad del suelo.
La hidratación también juega un papel muy importante: no deberías permitir que la planta se secara entre cada riego, que deberá ser intenso al menos una vez a la semana, para que las raíces reciban la humedad necesaria durante el proceso de crecimiento, destaca el portal de la universidad mencionada.
Hora de la cosecha
Cuando tu perejil esté maduro, podrás cosecharlo. La Universidad de Minnesota sugiere consumirlo fresco ya que, si bien puedes deshidratarlo o congelarlo, estos métodos podrían sacrificar parte del sabor.
Sin embargo, si deseas almacenar tu perejil y deshidratarlo de forma rápida, podrías introducir las hojas unos pocos minutos en un horno a alrededor de 100°F (38°C). También puedes conservar la hierba fresca dentro de pequeñas bolsas en el congelador. De ambas maneras, de acuerdo con la universidad, el perejil podría durarte hasta un año.
Con estos consejos ¡saca provecho de esta magnífica hierba!
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