COSTA RICA ES EL PRIMER PAÍS DE L.A. QUE PROHÍBE LA CAZA DEPORTIVA
Un millón de felicitaciones. Qué bien viene haciendo las cosas Costa Rica. Se han convertido en un ejemplo a seguir, ojalá los gobernantes del resto de países del continente entendieran la importancia de la protección de la fauna como lo hacen en Costa Rica.
Sucedió hace un tiempo ya, pero no deja de ser una excelente noticia que nos alegra el día. Parlamentarios del congreso costarricense aprobaron de forma unánime, la reforma a la Ley de Conservación de Vida Silvestre, que ahora prohíbe la caza de animales como deporte.
A pesar de ser un país más bien pequeño, Costa Rica posee una biodiversidad envidiable. Por esto y para fomentar el turismo, casi un 25% del país está protegido, como reserva o parques. Sin embargo y como en muchos países con gran biodiversidad y fauna, la caza de animales es un problema muy difícil de controlar. Los turistas además de querer acercarse a la naturaleza y animales, muchas veces quieren ir de “caza” y pagan hasta 5 mil dólares por salir a cazar pumas, jaguares y otros bellísimos animales. Esta práctica estaba causando una gran baja en el número de algunas especies, que incluso solo existen en costa rica, por eso la decisión de prohibir la caza tenía que ser tomada cuanto antes.
Con la nueva reforma ley, quienes sean sorprendidos en la caza furtiva, tendrán multas de hasta tres mil dólares y podían pasar hasta cuatro meses en prisión.
Otra buena nueva de la reforma, es que también se castigaran a quienes vendan felinos y aves coloridas como si fuesen mascotas o a quienes trafiquen animales exóticos, los cuales son enviados a otros países en las peores condiciones que se puedan imaginar y muchas veces mueren en el camino.
Costa Rica está dando todo un ejemplo en materia de empatía y protección animal. Una gestión que debieran imitar los políticos de todos los países de Latinoamérica, para que no sigamos perdiendo especies por “deporte”.
Costa Rica marcó un precedente en la historia latinoamericana cuando se convirtió en el primer país en aprobar una Ley de Vida Silvestre para proteger a todas sus especies de la caza. Y sus habitantes nos dieron a todos una lección de madurez y conciencia: esta fue la primera ley propuesta e impulsada por los ciudadanos –y no diputados– y, por supuesto aprobada por el Congreso. En ese entonces, la norma fue llevada ante el poder legislativo con el respaldo de 177,000 firmas recogidas por la Asociación Preservacionista de Flora y Fauna (Apreflofas).