José y un grupo
de amigos están dentro de un sauna, cuando de repente empieza a sonar
el celular. José lo toma y contesta:
- ¿Si?
- ¿Amor, eres
tú? Se oye muy mal...
- ¿Hola?
- ¿Estás en un
sauna?
- Sí.
- Es que estoy
en una tienda de ropa viendo un abrigo divino justo para esta
temporada. ¿Puedo comprarlo?
- ¿Cuánto vale?
- ... 200
dólares.
- OK, y cómprate
también un bolso, amor.
- Es
que... bueno, resulta que también pasé por el concesionario de coches y
pensaba que quizá es momento de cambiar el nuestro, y ¿sabes qué? Pues resulta
que el BMW está en oferta y hay uno que está buenísimo, y me gustó mucho.
- ¿Cuánto
vale el coche en oferta?
- Sólo
37.000 dólares, pero es un coche fantástico.
- Ok,
cómpralo y pide todos los accesorios. Tú tranquila- si sube un poco más el
precio, no me voy a enojar...
La mujer
sorprendida, viendo que su esposo estaba más generoso que de costumbre, decidió
seguir.
- Mi
amor, ¿te acuerdas de que mi mamá quería venir a vivir con nosotros? ¿te parece
si la invito a que venga un mes de prueba?
- Vale,
pero no me pidas nada más.
- Sí sí,
está bien. ¡Te quiero mucho!
- Yo
también te quiero mi vida, un besito, te dejo.
Al colgar el teléfono, José mira a todos sus compañeros y pregunta:
- De quién es este teléfono?