Cuando los conquistadores españoles vieron cómo los nativos sacaban partido de la planta flor de la pasión y daba tan buenos resultados en casos de nervios agudos o de episodios leves de nerviosismo, decidieron llevársela con ellos. Desde entonces, comenzó a cultivarse en otras zonas con climas similares al tropical o al subtropical en el mundo. Y fue ahí dónde se marcó su expansión y creció su uso.
A día de hoy, puedes comprar las semillas de la flor de la pasión en cualquier tienda que las venda, o simplemente hacer en los herbolarios con productos que la incluyan en polvo o triturada. Es bastante fácil de encontrar por su fama y sobre todo por los buenos resultados que da para calmar la ansiedad y nerviosismo.
Puedes calmar los nervios con flor de la pasión sin necesidad de pastillas para dormir ni otro tipo de pastillas.