1.- Añade un puñado de sal en tus lavados. Este truco hará que la ropa no se encoja cuando la pongas a secar al sol, especialmente en los días de intenso calor. Si además añades un chorrito de vinagre a tus lavados, conseguirás una ropa mucho más suave sin necesidad e utilizar suavizante industrial.
2.- Disminuye un dolor de muelas. Todos sabemos lo molestos que resultan los dolores de muelas. Para hacerlos más llevaderos puedes enjuagarte la boca con agua tibia en la que hayas diluido previamente un puñado de sal. Este truco también es muy efectivo para cicatrizar las llagas de la boca.
3.- Exfolia tu piel. Fabrica tu propia crema exfoliante con sal y aceite de oliva. Conseguirás un piel limpia de impurezas y muy suave.
4.- Limpia los cristales de tu casa con sal. Prepara en un bote con pulverizador una mezcla de agua tibia y sal y utilízalo como producto limpia cristales. Esta mezcla es muy útil también para utilizarla en los cristales del coche.
5.- Acaba con las hormigas en casa. Espolvorea un poco de sal en los lugares por los que estos molestos y enanos insectos pueden entrar como puertas, ventanas… y funcionará como un genial insecticida casero.
6.- Consigue un blanco natural para tus dientes. Prepara una mezcla de bicarbonato de sodio y un poco de sal y utilízalo de vez en cuando como pasta de dientes. Conseguirás blanquear tu boca sin necesidad de utilizar dañinos químicos.
7.- Tuberías sin malos olores. Prepara una mezcla de sal gorda y agua templada y viértela por las tuberías de la cocina y el baño. Verás cómo los malos olores y los atascos desaparecen.
8.- Haz que tus objetos de plata brillen. Será suficiente preparar una mezcla de vinagre blanco y un poco de sal para frotarlos con un paño limpio. La suciedad desaparecerá de la plata sin dañarla.
Tomado de Pura manualidades