Jade Sparham, de 20 años, y Liam Scaife, de 21, habían decidido tener un hijo y después de que se enteraron que iban a ser papás, se dieron cuenta de que la pequeña que esperaban había sido concebida el 14 de febrero de 2015, día de San Valentín. Sin embargo, nunca se imaginaron que su hija nacería con un curioso detalle sobre su frente.
Una peculiar marca que parece un corazón se formó dos días después de que la niña nació, pero la mamá pensó que eso era grave y la llevaron al médico. Ahí confirmaron que era solo una marca de nacimiento.
“Es como nuestro propio cupido bebé”, comentaron los padres al periódico Daily Mail.