Ambos políticos han estado reunidos en la sede del Congreso de los Diputados para cerrar los flecos del preacuerdo, que no incluiría vetos esta vez y permitiría a Iglesias ser vicepresidente segundo del Ejecutivo.
"Lo que en abril era una oportunidad histórica, es hoy una necesidad histórica", aseguró Iglesias, quien agradeció a Sánchez trabajar "codo con codo" para mejorar las vidas de los españoles.
Los pormenores de la composición del Gobierno se conocerán después de la investidura.
"Tenemos que superar la situación de bloqueo que hemos vivido los últimos años. Nuestro país necesita un Gobierno progresista, estable y sólido. Y lo necesita ya", dijo Sánchez. "Lo único que no cabrá en el futuro será el odio entre españoles", prosiguió. Sánchez explicó que se trata de un acuerdo de Gobierno para los próximos cuatro años.
"Ambas formaciones comparten la importancia de asumir el compromiso en defensa de la libertad, la tolerancia y el respeto a los valores democráticos como guía de la acción de gobierno de acuerdo con lo que representa la mejor tradición europea", asegura el documento acordado por ambas formaciones y publicado poco antes de la comparecencia de sus líderes.
Los ejes prioritarios del preacuerdo pivotarán sobre los siguientes temas:
- Consolidar el crecimiento y la creación de empleo.
- Trabajar por la regeneración y la lucha contra la corrupción.
- Lucha contra el cambio climático.
- Fortalecer las pequeñas y medianas empresas.
- Aprobación de nuevos derechos relacionados con la eutanasia.
- Asegurar la cultura como derecho y combatir la precariedad en el sector.
- Políticas feministas
- Revertir la despoblación
- Garantizar la convivencia en Cataluña
- Justicia fiscal y equilibrio presupuestario
El PSOE y UP suman 155 escaños, de manera que necesitarán el apoyo de otras formaciones políticas para que la nueva legislatura eche a andar y se acabe al fin con el bloqueo político. El Partido Nacionalista Vasco (PNV), que cuenta con 7 diputados, se apresuró a dar su apoyo a la futura coalición.