De la patriota se han popularizado dos anécdotas: su reacción ante el intento de suicidio del hijo mambí para impedir fuera apresado por tropas enemigas y cuando vistió de mujer a otro de sus vástagos- Nicolás-, con el fin de evitarle la prisión e incluso la muerte.
Sin embargo, de esta holguinera, de fuerte carácter y genio vivo, existen muchas historias por revelar, asegura la directora de la Casa Natal Calixto García en Holguín, Yanilaysi Ortiz.
El nacimiento de la guerrera cubana
En el libro ‘Apuntes biográficos de la Familia del Mayor General Calixto García Íñiguez’ recoge que once días después del nacimiento de la primogénita del matrimonio del holguinero Miguel Iñiguez León y la dominicana María Merced Landín Moreno fue bautizada en la Parroquial Mayor de San Isidoro, localizada hoy en el centro histórico de la urbe cabecera.
Con solo 16 años contrajo matrimonio con Ramón García en 1835. Ella no aportó dote, al contrario fue el pretendiente quien dispuso de tres mil 500 pesos, toda una fortuna para esa época.
La pareja recibió como regalo de bodas una casa situada en la calle Santiago (Morales Lemus), esquina a la del Rosario (Frexes), donde actualmente está ubicada la Casa Natal del insigne mambí, convertida en Monumento Nacional de Cuba.
Esa unión marital, que si bien se realizó según los cánones de la época, no escapaba de una gran inestabilidad. Según aclaraciones en ‘Apuntes’, Cía propuso la separación más de una vez, por razones, sobre las que ella alegaba: ‘me reservo…’.
Aún así, del matrimonio nacieron ocho hijos, cuatro hembras e igual cantidad de varones. Por ejemplo, a pesar, de ella asegurar que ‘estaban separados desde 1842’ tuvo en ese mismo año a su hija Leonor; Rosario en 1845 y a Nicolás en 1855.
El casamiento finalizó en 1867 y Lucía le otorgó un poder a su segundo descendiente, Calixto, para que reclamara legalmente las propiedades de ella que estaban en manos de Ramón, pues no deseaba que estuviesen en su poder.
Cía se destacó por ser una especie de empresaria muy avispada y emprendedora, capaz de manejar los amplios bienes de la familia dispersos en Holguín y Jiguaní, territorio de la actual provincia oriental de Granma.
Tal es así, que al morir su padre, Miguel Íñiguez, en 1851, comenzó una disputa judicial contra su madre para adquirir la herencia dejada por él, proceso que concluyó con la división de los bienes, el cual se interrumpió con el fallecimiento de su progenitora y quedó, finalmente, como única y universal heredera de sus padres.
Por su próspera y favorable posición económica era muy solicitada para que fungiera de madrina de muchos niños, uno de ellos fue Manuel de Jesús Candelario Avilés Lozano, quien años más tarde, en 1882, fundó la legendaria Orquesta Avilés.
Pero, sin dudas, lo que más distinguió a Lucía fue el amor incondicional por sus hijos, el más conocido, y quizás el más ferviente el profesado a Calixto, quien heredó el temperamental y enérgico carácter de su madre.
Lucía en la manigua cubana
Al unirse Calixto García Íñiguez a la guerra independentista, en 1868, la vida de Lucía cambió, pues las autoridades españolas perseguían a las familias vinculadas con los insurrectos, que con posibilidades o sin ellas se vieron obligadas a marchar hacia los campos en busca de refugio.
Lucía estuvo entre ellos, abandonó las comodidades hogareñas y sus propiedades y aunque estuvo escondida varios meses cayó presa junto a su familia. A pesar de ello recaudó fondos, envió comida, cosió ropas y dispuso de vendajes para los campamentos insurrectos.
En 1870, ella y sus hijos recorrían la manigua de Canoa de la India (Aguas Verdes en Granma), sin la protección de las tropas mambisas, cuando fueron detenidos por una avanzada española.
Ante esa situación que ponía en peligro la vida de su hijo Nicolás de apenas 15 años de edad, Lucía lo vistió de mujer; sin embargo, el oficial al mando del destacamento desconfió.
La irreverente madre le contestó: ‘¡Sí, es varón! ¡Es mi hijo que traigo del campo mambí! ¡Si usted me descubre probará que desconoce el santo amor de madre, si guarda el secreto será el primer caballero del Ejército Español!’.