A las preguntas de María Servini, la única jueza del mundo que investiga los crímenes del franquismo, tendrá que enfrentarse Martín Villa, de 85 años. Una cita que no se celebrará en Buenos Aires como pretendía la magistrada, sino que tendrá lugar en el Consulado de Argentina en Madrid. Está programada para las 16.00 hora española y será realizada a través de la plataforma digital Zoom para evitar los problemas de movilidad causados por la pandemia de coronavirus.
En un principio, el exministro tendría que haber declarado en la capital argentina el 9 de septiembre de 2019. Fecha que fue pospuesta para el 11 de diciembre a petición de la jueza, ya que Argentina incursionaba en un proceso electoral y Servini es la magistrada competente en este fuero. La cita volvería a ser postergada, después de un escrito del abogado del expolítico, por lo que la jueza decidiría viajar a España y tomar declaración a Martín Villa en la Embajada de Argentina en Madrid el 20 de marzo de 2020. Entonces, el coronavirus volvería a retrasar la reunión.Ahora, a menos que aparezca otro imprevisto, el que también fue vicepresidente del Gobierno de Calvo Sotelo se someterá a las preguntas de la magistrada argentina. Tras el interrogatorio, Servini podría sobreseerlo, procesarlo o pedir más medidas, como sumar estas declaraciones a las de otros imputados. Y es que Martín Villa es uno de los 15 acusados de los 20 originales que imputó la encargada del Juzgado Federal nº1 de Buenos Aires por crímenes de lesa humanidad durante el franquismo en octubre de 2014, año en el que dictó órdenes internacionales de detención contra todos ellos.
Un caso que podría dar un cambio de dirección tras la decisión de la fiscal general Dolores Delgado, que dejó sin efecto la orden por la que se instruía a todos los fiscales a rechazar toda rogatoria, exhorto o pedido de medidas de prueba que tuviera que ver con esta querella. Una directriz impulsada por la anterior fiscal general, Consuelo Madrigal, y que impedía a los jueces colaborar con la causa de Servini.
Los supuestos delitos de Martín Villa
Inés García Holgado, Adriana González y Darío Rivas presentaron una querella el 14 de abril de 2010 contra los delitos del franquismo. Los tres cuentan con familiares que murieron a manos de la dictadura. A 31 de agosto de 2020, García reconoce al diario Público estar feliz por la realización de este interrogatorio, a la par que intranquila. "El hecho de que, en varias ocasiones, el Gobierno español haya protegido a este asesino me provoca un sentimiento de ansiedad ante la espera, ya que deben transcurrir unos días más para que se tome la declaración indagatoria a Martín Villa", argumenta.
También se le achacan, ya como ministro del Interior, las muertes de Rafael Gómez Jáuregui y José Luis Cano Pérez durante la Semana Pro Amnistía celebrada en mayo de 1977 en País Vasco y Navarra. Además, será preguntado por los Sanfermines de 1978, en concreto por el 8 de julio, cuando un grupo de jóvenes desplegó en una pancarta por la amnistía total en la arena de la plaza de toros de Pamplona. Este suceso acabó con la irrupción de la Policía que disparó contra la multitud. Intervención que acabó con la vida de Germán Rodríguez y con 150 heridos.
Martín Villa es sospechoso en Argentina por "homicidio con la circunstancia agravante de haber sido cometido con el concurso premeditado de dos o más personas". Un crimen que conlleva una pena de prisión perpetua. Además, se le imputan al exministro delitos de privación ilegítima de la libertad, torturas y lesiones graves, añadidos en las querellas individuales.