Entro presurosa al elevador El aroma de mi perfume Invade mi alrededor Una mano se interpone En las puertas y entras tu...
El espacio que hay Lo llena tu presencia La vena que hay en mi garganta Late sin control, secándose mis labios Mis manos tiemblan y se humedecen Al sentir tu mirada recorrerme
Te acercas lentamente tomando mis manos Para acercarlas a tu punto medio Y así yo sienta el temblor y la dureza que emanas Me abrazas con locura, aprisionando mi trasero Fuertemente hacia ti, recorriendo al mismo tiempo Con tus labios mi cuello, para detenerte en el hueco de mis pechos Es una agonía es morir y volver a renacer En tus brazos, me besas con el alo de tu alma Suspirando con anhelo y deseo de saciarte de mi
Mis manos temblorosas vuelan Hacia tu pecho queriendo quitar Lo que separa la piel de nuestros hambrientos cuerpos Con firmeza arranco tu camisa Pero... ¿que sucede? Despierto sola en mi cama Con la sabana en mis manos Solo fue una caricia de tu alma A la soledad de la mía en la distancia Y la complicidad de la noche