Bajo las alas de este laurel florido Amémonos. El viejo y eterno lampadario De la luna ha encendido su fulgor milenario Y este rincón de hierba tiene calor de nido.
.... Amémonos. Acaso haya un fauno escondido Junto al tronco del dulce laurel hospitalario Y llore al encontrarse sin amor, solitario, Mirando nuestro idilio frente al prado dormido.
... Amémosnos. la noche clara, amorosa y mística, Tiene no sé qué suave dulzura cabalística. Somos grandes y solos sobre la haz de los campos.
... Y se aman las luciérnagas entre nustros cabellos, Con estremecimientos breves como destellos De vagas esmeraldas y extraños crisolampos.