Se pierden en la bruma de mis sueños,
las ideas que emanan del amor primero,
amor que nace en tus ojos trigueños.
Sonrisa suave dulce y coqueta,
que a mi alma llego con el viento,
trayendo con ella tu dulce aliento.
Fue el beso primero que recibí de tus labios,
la distancia no pudo evitar la caricia,
que tu amor envió a través de la brisa.
Amor que nace de tu andar cadencioso,
que con fuerza suprema llamo mi atención,
despertó en mi pecho el calor de la pasión.
Amor que nace del sonido de tu voz,
que como una sirena mi corazón encanto,
trayéndome dicha y amor con su canto.