El flamenco no sólo está de moda en todo el mundo como arte, sino que, en los últimos años, numerosos diseñadores internacionales han vestido a los bailaores más famosos y han llevado a los desfiles la música y el baile flamenco. Ahora las pasarelas también se llenan de ropa con inspiración flamenca para la temporada 2005. Y es que se lleva lo jondo. ¡Atrévete a sacar los volantes a la calle la próxima primavera!

 

El 'look' flamenco está de moda. Volantes, lunares, tonos rojos, bordados y flores en la cabeza son lo de hoy. Una de las principales tendencias para la próxima primavera - verano es justamente la que está inspirada en España. Las pasarelas se han llenado de corsés bordados y coloridos y femeninos mantones de Manila. También se han visto muchos vestidos con flecos y milenarias mantillas. Los accesorios gritan "¡olé!" e incluyen collares de filigrana, aretes y peinetas. Y en cuanto al maquillaje, regresan los coquetos lunares junto a la boca, las sensuales bocas en forma de corazón y las largas pestañas que velan ojos oscuros.

Inspiración flamenca

Juan Duyos presentó en la Pasarela Cibeles una colección muy española.


Los sevillanos Vitorio & Lucchino siempre han apostado por una línea muy flamenca en sus trajes de noche y de novia, pero ahora se suman otros modistos internacionales como John Galliano, Valentino, Tom Ford para Yves Saint Laurent Rive Gauche y Dolce & Gabbana. En México, también existe influencia española en las colecciones de Arturo Ramos, Blanca Estela Sánchez, Macario Jiménez, Viviana Parra y Mariana Luna.

En la Pasarela Cibeles de Madrid sorprendió la apuesta renovadora del español Juan Duyos. Con el título 'Pena, penita, pena', presentó una colección muy española y poética para la primavera- verano 2005. Rojo sangre, blanco encalado, negro luto, amarillo sol, verde agua. Volantes, encajes, lunares, y flores que combinan con el algodón, el lino y la seda. Pantalones que imitan al típicamente cordobés y faldas de tafetán con aplicaciones de lunares. Referencias religiosas en los complementos. Y tacón de bailaora para botines y zapatos troquelados en forma de lunares. La música jugó un papel importante. La tradición, pero ligeramente alterada. Se oyó flamenco cantado en francés, la copla 'La bien pagá' con aires de jazz y ritmos árabes aflamencados.