Elevemos nuestras oraciones por la pobre gente de Haitì,
que està pasando por momentos muy difìciles.
No cuestionemos, no demos a Dios un Por què, Señor.
El sabe por què suceden las cosas, sòlo oremos
y pidàmosle a El
porque la gente se reestablezca, recupere lo perdido,
tenga paciencia y no pierda màs la calma.
Que las proviciones sean solventes, que la ayuda siga llegando.
Amèn.
Haitì,