Correo electrónico:

Contraseña:

Registrarse ahora!

¿Has olvidado tu contraseña?

As Poderosas e Amigos
 
Novedades
  Únete ahora
  Panel de mensajes 
  Galería de imágenes 
 Archivos y documentos 
 Encuestas y Test 
  Lista de Participantes
 RECORDAÇÕES 
 MOLDURAS 
 §§ RECEITAS §§ 
 CÂNCER DE MAMA 
 SAÚDE 
 FUNDOS E TEXTURAS 
 CANTINHO DA MARY 
 CANTINHO DA ESTRELA DALVA 
 RAZÕES & EMOÇÕES 
 PEDIDOS E ENTREGAS DE ASSINATURAS 
 LETRAS E MÚSICAS 
 GIFs, IMAGENS e FIGURAS 
 MIMADA DA SEMANA 
 CHAT PODEROSAS 
 
 
  Herramientas
 
General: Noche de sombra , sombra de noche
Elegir otro panel de mensajes
Tema anterior  Tema siguiente
Respuesta  Mensaje 1 de 1 en el tema 
De: enri pas  (Mensaje original) Enviado: 11/01/2015 18:11





 

     

   

En soledad, mujer enamorada,
perdido el brazo en torno a tu cintura,
a ti misma abrazada,
en noche tan desierta, tan oscura.

Hay canciones
de amor en cada calle,
se encienden las farolas,
se pueblan de calor montaña y valle,
y el temblor de tu sexo, tan a solas.


  Breveria Nº 1969, de FAH    

 
 
 

 

 

 

Noche de sombras,
sombras de noche
 
Despierto estoy. Quiero dormir la sangre,
pero sigue gritandome en las venas;
no me deja dormir, se me revuelve
no s� si en alborozo o si en protesta.
Es como perro que a su dueño muerde,
y ni caricia ni rigor lo aquietan.
O tal vez es el potro mal domado,
que no atiende a la fusta, y se rebela.
Se me alborota el cuerpo,
la piel se me caldea.
Oigo nombres al fondo de la mente,
que toman forma en sombras o siluetas,
me acosan, ruegan, tiran de las sabanas, 
y susurran ofertas.
Floja, la voluntad se debilita.
No me defiendo ya. Que me posean.
Tantos ojos y labios entreabiertos,
tantas manos y lenguas,
y tantos senos solidos, redondos,
Se arrojan sobre mi, me manosean.
Y de repente ya no soy el ciervo
sin agresividad, o la gacela.
Se me alargan las garras en los dedos,
y los colmillos, ahora soy pantera,
desat�ndose todos mis instintos,
derramandome a chorros entre piernas
abiertas sobre mi, desconocidas,
en cien abrazos, penetrando grietas
h�medas, receptoras y convulsas,
que saben exprimir, que me doblegan.
Lentamente las sombras
iran desvaneciendose. Una niebla
viscosa, gris, envuelve el aposento.
Vuelve el silencio. ¿Se ausenta? Las venas
arrastran sangre ya sin fuego, y callan,
como callan las manos de la ausencia.
Con afabilidad me toca el sueño,
leve tacto de seda. 
 
Los Angeles, 23 de junio de 2009
 

 

 

 


 
 

 

 

 

 



Primer  Anterior  Sin respuesta  Siguiente   Último  

 
©2024 - Gabitos - Todos los derechos reservados