Una nueva alternativa para revivir el rostro después de unas intensas vacaciones: máscaras transepidérmicas que prometen una revolución en tu piel.

En forma progresiva, con el paso de los años, la piel y los músculos van perdiendo firmeza. Los primeros síntomas del paso del tiempo comienzan a notarse entre los treinta y treinticinco años dependiendo de distintos factores: hormonales, genéticos, clima, polución, estrés y fundamentalmente debido a la exposición solar reiterada durante años y sin protección alguna. Se sabe actualmente que los principales responsables del envejecimiento cutáneo son los radicales libres. Estos son producidos dentro de nuestro organismo y atacan a las células del tejido, degradando el colágeno y la elastina de la piel. Nuestro propio organismo se defiende de esta agresión produciendo sustancias que actúan en contra de estos radicales. Por esto es fundamental tener una alimentación adecuada. La cosmética también trabaja a favor de nuestra piel incorporando sustancias antirradicales que los combaten o neutralizan su efecto en la piel.

POR QUE MASCARAS TRANSEPIDERMICAS?

El uso de estas máscaras saturadas en principios activos tales como Vitamina C, Vitamina E, Vitamina A, Aloe Vera, Tilo, Caléndula, Pepino etc., es una de las técnicas modernas más comunes a nivel mundial, ya que se trabaja en la piel por saturación de productos. El tejido se ve obligado a absorber las sustancias en que está saturada la máscara.
Este tratamiento con máscaras puede hacerse semanalmente, como complemento de otros tratamientos o para lucir espléndida en una ocasión especial, ya que los resultados son óptimos, y notables de forma inmediata.
Este tratamiento con una máscara transepidérmica permite:

•Estimular la producción de colágeno
•Mejorar la microcirculación cutánea.
•Combatir la producción de radicales libres.
•Mejorar la hidratación de la piel.

TRATAMIENTO PASO A PASO

1. Masajear el rostro con una emulsión de limpieza durante algunos minutos para limpiar maquillaje, células y residuos de la polución ambiental.
2. Con un producto abrasivo, de gránulos de microtene con bordes redondeados, afinar la superficie de la piel, aumentando así su capacidad de absorción.
3. Luego de enjuagar, aplicar una loción para neutralizar el PH de la piel y completar la limpieza.
4. Colocar una ampolla de vitamina C y masajear hasta su total penetración.
5. Colocar la máscara transepidérmica antiarrugas.
6. Dejar actuar la máscara durante veinte minutos. Retirar y masajear el resto de la sustancia que pueda haber quedado sobre la piel. De esta forma el rostro lucirá terso, hidratado, con un aspecto relajado y radiante.