Nadie te arrancará de mis pensamientos;
El sol dejará de sonreírle, a una tarde de ardiente verano.
Las flores dejaran de brotar en primavera y n
o darán su acostumbrado perfume, en los jardines
y en los campos.
Tal vez el océano pierda su azul verdor,
al observarlo a la distancia,
pero yo jamás te sacaré de mis pensamientos.
Y te pasearás triunfante en mi memoria.
Nada hará cambiar mi forma de amarte.
Quizá nunca toques mis manos,
ni acaricies mis cabellos en una noche,
que invite a una intimidad delirante,
más mi alma travesara fronteras,
y estará allí junto a ti para amarte.
Te amaré hasta el amanecer,
hasta dejarte extenuada, llena de mi amor,
de mis caricias y mis besos y
lloraré de emoción al sentirte solamente mía.
Permaneceré siempre a tu lado.