TRATANDO CON EL ENOJO
Maestro,
¿qué debo hacer para no
quedarme molesto?
Algunas personas
hablan
demasiado, otras son ignorantes.
Algunas son
indiferentes.
Siento odio por aquellas que son mentirosas
y sufro con aquellas
que
calumnian.
¡Pues, vive como las flores!
Advirtió el
maestro.
Y ¿cómo es vivir como las flores?
Preguntó el
discípulo.
Pon atención a esas flores
-continuó el
maestro,
señalando unos
lirios que
crecían en el jardín.
Ellas nacen en el estiércol,
sin
embargo son puras y perfumadas.
Extraen del abono maloliente
todo
aquello que les es útil y saludable,
pero no permiten que lo
agrio
de la tierra manche la frescura de sus
pétalos.
Es justo angustiarse
con
las propias culpas,
pero no es sabio permitir que
los vicios de
los demás te incomoden.
Los defectos de ellos son de
ellos y no tuyos.
si no son suyos, no
hay
motivo para molestarse.
Ejercita pues,
la virtud de rechazar
todo
el mal que viene
desde
afuera.
Bendiciones!!!