El edificio octogonal que acoge los baños Rudas fueron construidos durante la regencia del bajá turco en 1566
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Hoy en día, y gracias a la pasión de los húngaros por los dulces, Budapest cuenta con algunas de las mejores pastelerías y cafés de Europa
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La casa-museo Franz Liszt
Es un lugar de visita recomendable en el año del bicentenario del músico que permite fácilmente trasladarnos a otra época e imaginarnos vivamente la figura del gran compositor
El pequeño museo de la Academia de la Música está ubicado en las habitaciones que Liszt ocupó durante su última estancia en Budapest
Entre otros instrumentos
Dos pianos de cola, un Bosendorfer usado por los alumnos
Chickering, el del maestro, con un impresionante atril de plata
Que incluye los bustos de
Beethoven, Schubert y Weber
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Los baños termales del hotel Gellért de estilo secesionista
Incluye
Saunas, pozas, una piscina al aire libre que puede generar olas artificiales y una piscina espumosa
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El Castillo de Buda
Forma parte del Patrimonio de la Humanidad
Se levanta en una colina y fue el palacio de los reyes húngaros en Budapest
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El parque Millenáris
Toma asiento en el lugar que ocupaba la antigua fábrica eléctrica Ganz
Acoge un moderno centro creativo para
Exposiciones, obras de teatro, conciertos y espectáculos
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El Parque de Estatuas
Relata la historia de la dictadura y la democracia en el país, una visita obligatoria para los que están interesados en la historia del siglo XX
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El Parlamento, el edificio más monumental de Budapest, se asoma al Danubio
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Panorámica nocturna del puente de las Cadenas, el Palacio Gresham y, al fondo, la basílica
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El Paseo del Danubio
Lleva al lujoso
Four Seasons Hotel Gresham Palace Budapest
Todo un hito del art nouveau, con vistas panorámicas del río y las colinas de Buda
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