RUBÉN DARÍO GARCÍA LEÓN
SANTA CRUZ DE TENERIFE La cantidad de agua de niebla recogida 1en el Observatorio Atmosférico de Izaña (Tenerife) con el nuevo pluviómetro de niebla desarrollado en el Centro de Investigación Atmosférica de Izaña (CIAI) cuadruplica la obtenida por precipitación de lluvia y recogida por un pluviómetro convencional, según aseguró a Efe Ramón Ramos, jefe de la Unidad de Sistemas Básicos del citado centro de investigación de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Con el estudio realizado por Ramón Ramos, Rubén de Campo y el resto del equipo de la Unidad de Sistemas Básicos del CIAI, entre el 1 de noviembre de 2009 y el 31 de octubre de 2010, en el entorno del Observatorio Atmosférico de Izaña se recogieron 379,3 milímetros de agua procedentes de la lluvia, y 1.549,9 de la niebla o precipitación horizontal. El estudio sobre la captación de niebla se llevó a cabo con un pluviómetro digital, al que en la parte superior se añadió una malla de forma cilíndrica para registrar la precipitación horizontal y que ésta fuese la misma con independencia de la procedencia del viento, explicó Ramón Ramos.

Las precipitaciones apreciables de lluvia en el entorno de Izaña durante el periodo anual de este estudio se concentraron en 43,4 días, en los que se recogieron 461,5 milímetros de agua.

Ramón Ramos comentó que, climatológicamente hablando, la ausencia de precipitación de lluvias en Izaña es de unos ocho meses, mientras que la de la niebla es de cuatro meses. Indicó que aunque se sabe desde hace mucho tiempo que gran parte de la vegetación del Teide se mantiene por la niebla, hasta ahora no se había cuantificado su aportación, y agregó que en la estación de lluvias es cuando más precipitación horizontal se capta, mientras que en el macizo de Anaga la estación de recogida de agua de niebla es, principalmente, el verano.

La diferencia entre Izaña y Anaga se debe a que en verano es cuando con mayor frecuencia e intensidad soplan los vientos alisios y mayor es la presencia de estratocúmulos que causan la niebla que cubre las cumbres de Anaga, mientras que Izaña queda por encima de esa capa nubosa. Los resultados de este estudio son algo que esperaban los expertos.