Cuando de dar ayuda se trata, si no estás motivado en algún grado por el cuidado hacia la persona, es mejor no hablar. Tenemos el potencial de ser mensajeros de la Luz para otros, razón por la cual se siente tan bien cuando podemos ayudar a las personas; la Luz está fluyendo a través de nosotros.
Pero si queremos que la Luz brille en nuestras palabras, debemos ser la Luz.