Ya no espero tu regreso, ni anhelo el desconsuelo de saber de ti ya no cuento los segundos moribundos sin tus ojos ya no junto los despojos de mi amor
Ya no juro ni prometo ya no corro tras tu sombra ya no oigo a quien me nombra las bondades del amor
Derrumbando los altares que con soledades levante en tu honor ya no creo que en mi pecho siga latiendo un corazon
Estas aguas necesitan olvidarse de este viaje Allí, donde la sed presta al viraje recodos para amar que ya marchitan. corazòn... ya no espero nada de ti