El dinero estaba originalmente basado en monedas de oro y plata.
Kabbalísticamente, la plata representa compartir
y el oro representa recibir.
Cuando compartimos e intercambiamos dinero con los demás,
nuestra conciencia debe ser hacer un trato justo
y ayudar a la otra persona a obtener lo que él o ella necesita.
Esta clase de conciencia de compartir inyecta equilibrio
en nuestras interacciones,
asegurando que el dinero que usamos esté lleno de Luz.
Si intercambiamos dinero y bienes sólo para nuestro provecho egoísta,
no hay circuito en nuestras monedas.
La oscuridad aparecerá inevitablemente
más adelante en nuestras vidas.
Hoy, sé justo en tus tratos.
Tu estado mental determinará si tus billetes generan Luz
para todos o simplemente un chispazo temporal de placer
seguido por la oscuridad
Yehuda Berg
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