VII.
De nuevo la espera.
Es de mañana. Pero esperas la noche.
Y la noche llega. En pleno día. De nuevo te abraza, te cautiva.
El miedo también está contigo.
Una lucha entre lo que eres y lo que esperas ser… todo lo que ella quiera.
Sus expectativas te presionan, expectativas que tú mismo le adjudicas.
Eso pesa. Pesa mucho. Porque quieres ser eso que ella anhela.
No quieres fallar… y eso mismo te hace dejar de ser quien eres.
Las cosas no son como se sueñan. La realidad golpea como una piedra fría.
¿Esa es tu realidad?
¿Sentirte inseguro y transmitir esa inseguridad?
Estás aterrado.
La noche puede irse.
Tu día puede ser eterno. Está en ti
|