El calor nos inunda, mientras nuestros cuerpos desnudos se observan mi boca se mezcla con la tuya y nuestras lenguas se abrazan mi mano se pierde lentamente entre tu sexo húmedo y cálido mientras que la tuya me masturba sensual e incansablemente mis brazos rodean tu cintura y te piden venir hacia mi pero te rehusas porque el miedo a este amor imposible te inunda mas no por mucho, ya que el deseo vence lentamente la razón y sin palabras ni señales te unes a mi en cuerpo y alma, nuestros cuerpos bailan una danza de lujuria, deseo y amor que por mucho tiempo buscaban, pero no habían logrado encontrar puesto que ambos necesitábamos lo que el otro poseía, experiencia y juventud y lentamente todo termina como empezó, sin palabras ni promesas, solo una sonrisa sale de entre tus labios para llegar a mi boca porque este juego ha terminado, ambos hemos vencido, ambos hemos perdido.
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