Toda próxima la prójima me gusta más porque sonríe porque quiere y no quiere con los joos porque se aprieta el pecho con soltura y cierra las piernas con codicia
Usted quédese amando al prójimo
Yo prefiero a la prójima que mira que sabe que toca que prueba
samaritana magdalena repentina la sin piedras la de nunca por si acaso la que enseña a dudar de verdad en salones repletos de prójimos
Quédese pues usted amando al prójimo
que yo seguiré a la prójima prófuga próxima pródiga