Estoy inmovilizada en el umbral de tu nombre Reminiscencia tuya que es solo eufonía y desazón Y te busco en un país de recorrido perplejo Háblame si reconoces mi silencio.
Puedo ir andando después de muerta Y perderme entre los más lóbregos escondrijos Lloriqueando a risotadas
Pero andar esa penumbra tuya de trazos inconclusos, No permite ansiedades.