Hay en un pequeño jardín
una Rosa fresca,
hermosa y perfumada
como ninguna.
Lejos, muy lejos
hay otra Rosa
reposando en una verde
y solitaria pradera,
regada con el rocío
de cada mañana.
Dos rosas nacidas
en distinta época;
una sigue floreciendo
cultivada con amor,
felicidad y alegría.
La otra dejó de florecer,
sus pétalos se marchitaron
no por falta de amor
y cuidados,
sencillamente…, se deshojó.
DOS ROSAS MUY QUERIDAS:
Una sigue bella sobre la tierra,
la otra…,
enterrada está bajo un cielo azul
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