La Vida me ha enseñado, a fuerza de golpes qué LA VERDAD presenta diferentes aristas, de las cuales tres parecen ser fundamentales para nuestra relación con La Realidad.
La Verdad de los hechos y de los sucesos presenta, generalmente, tres caras:
1.- Lo que realmente sucedió qué no es necesariamente lo que se nos enseña o se nos comunica y qué muchas veces solo se llega a descubrir pasados muchísimos años.
2.- Lo que los actores presentes en los sucesos relatan desde su propia visión de la realidad.
3.- Lo que llega a nosotros a través de las noticias, ya sea en tiempo presente o futuro.
Muchas veces estas tres verdades se superponen y coinciden y muchas otras no lo hacen.
La reflexión que me queda después de este análisis es que la Verdad puede ser manipulada a voluntad por los que la observan y que mediante su propia observación subjetiva de los hechos, imprimen a estos el caracter de "objetividad aparente y engañosa" que se transmite como reguero de pólvora.
Por último, si no somos lerdos en aprender, podemos determinar qué:
NO SOMOS DUEÑOS DE LA VERDAD.