Brotó una rosa en aquel riachuelo
Entre las rocas quebradas
Pulidas por el tiempo y por las aguas
Entre árboles y canto de pájaros
Brotó una rosa.
Y como alivio de mis anhelos
La corté para ti
Y posándola en la suave corriente
Pedí un deseo
Que aparecieras entre los troncos
Con una sonrisa para mi.
Y como los deseos jamás se cumplen
Me senté en silencio
A contemplar el cauce de aquel río
Y en silencio lloré, sin más consuelo...
Que el de la rosa que corté para ti.
Leyla Ley