Que gran verdad amigo Casimiro...
quien no recuerda los momentos felices de la niñez y este siempre fue...
unos de mis cuentos favoritos.
Creo que todos añoramos en algun momento esos dias felices de la infancia,
donde todo era inocencia y el miedo a las cosas feas estaba solo en los sueños.
O si de vez en cuando aparecian...eran papa o mama que los espantaban.
Nos sentiamos tan protegidos no?
¡Gracias por compartir tan lindo recuerdo como este que podemos ver aqui!
¡Que tengas un buen dia!!!
Un abrazo desde Uruguay.
Maria Ines.