De tanto Amarte... se esfumó la vida. Como el cometa que transponiendo espacios, llega sin fuerzas, por fricción… despacio… al desintegro de la luz tenida.
De tanto Amarte... me quedé sin tiempo, en la espera del sueño irrealizable. Se adormeció la ilusión… Llegó la noche… Y mi alma estalla confundida en lampo.
¡De tanto Amarte…! Se quedó en el silencio la palabra,
que tantas veces pronuncié sin labios,
y no he encontrado respuesta de los sabios
que a mi locura su razón le abra.
Desolación tenaz de algún reflejo de vez en cuando iluminar parece, y sin embargo, muere cuando nace, en grito ahogado o en lejano quejo.
¡De tanto Amarte…! Caminé en desiertos de vientos y arenas,
me secó la boca, me estallo en las venas,
y en silente rezo se perdió en quimeras…
Viví el ensueño de noches sin días... contemplando estrellas… cortando mil rosas… hincándome espinas…
Caminé las calles sin doblar esquinas, me sentí perdido… busqué mis caminos… y encontré senderos de nieve y de frío…
¡Ay…!!! ¡Si comprendieras lo que yo he sentido…!!!
¡Viví la locura de lo no tenido…! ¡Corrí hacia la nada Sin ver un destino…! ¡Me nacieron alas de ideas y olvidos!, ¡Me clavé puñales que siguen conmigo!. ¡Me sangre los labios con sueños perdidos! Miré desprenderse