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PARÁBOLA DEL JEFE
En el principio de los tiempos, cuando Dios creó al ser humano, los órganos vitales de éste comenzaron a discutir sobre quién sería el jefe.
Comenzó el cerebro exponiendo:
"Soy yo quien debe ser el jefe, pues ordeno y mando en vuestro funcionamiento.
A esto responden los ojos:
"El jefe deberíamos ser nosotros, pues guiamos a este ser y su cuerpo.
JAJAJAJAJA, comenzó a reir el corazón. "Si jefe puede ser alguien, ese soy yo, pues gracias a mi llega la sangre a todos ustedes, y sin ella no podéis funcionar."
"El jefe seré yo, pue soy quien os alimenta a todos", argumentó el estómago.
Las piernas, unilateralmente, bueno, mejor bilateralmente, se declararon jefas alegando que eran ellas las que transportaban el susodicho cuerpo.
Todos, absolutamente todos, se indignaron, sobre todo, por la cuenta que a cada órgano le traía.
Pero la indignación se convirtió en carcajada sonada cuando la mierda pidió al resto de órganos ser el jefe. Bastáronle sólo cuatro palabras y un hecho. Fueron esas cuatro palabras: "Yo seré el jefe". Y fue el hecho: "Se negó a salir durante cuatro días".
.......... El cuerpo estallaba,
.......... el estómago se sentía mal,
.......... los ojos se nublaban,
.......... el corazón amenazaba con pararse,
.......... las piernas temblaban.
Y entonces, todos los órganos al unísono gritaron, como si todos ellos uno fueran:
"¡¡¡ Qué sea la mierda el jefe !!!"
....... Y desde entonces cualquier mierda puede ser tu p... jefe. | |
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