Se trata de algo muy antiguo, una
receta de esas de nuestras abuelas. El Eucalipto tiene grandes
propiedades medicinales, es relajante, abre las vías respiratorias es
antiséptico y bactericida entre otras.
Una forma muy simple de usarlo es
cortar unas pocas ramas con las que elaborar un ramillete y colgarlo de
la ducha como vemos en la imagen.

Funciona de forma simple, el vapor
de la ducha hace que las hojas desprendan su poderoso aceite y de esta
forma nos beneficiamos de sus propiedades obteniendo un baño relajante y
saludable.
Un ramo de este tipo dura una semana, es mejor si las ramas son de un árbol joven.
No quitar demasiadas aunque el
eucalipto es un árbol muy resistente y crecerá aunque lo cortemos de
cuajo no se trata tampoco de hacerle daño innecesario.