Historia de las Letras Góticas
Su evolución dió origen a fuentes tan interesantes como el resultado final
FUENTES GOTICAS
HISTORIA de las FUENTES DE LETRAS NEGRAS
Por muchos años Fraktur, conocido también como fuente letras Alemanas Negras o
Deutsche Schrift, dominó la industria de la impresión en Alemania y en algunos otros países europeos.
El tipo Fraktur se desarrolló en el siglo 16 y es sólo una de cinco clases de tipografías que
son definidas como "fuentes góticas". La característica de todas esas fuentes es
el carácter fracturado de sus líneas.
La primera fuente gótica - obviamente una fuente escrita - fue llamada Textura a causa de
su oscura y difícilmente legible tipo, similar a una alfombra.
Originada en Francia en el siglo 13, se extendió rápidamente a Alemania, Francia,
Inglaterra, Holanda, España y Bohemia, donde casi todos los libros en Latín fueron
escritos en este tipo.
Fig. 1: Textura, escrita en Francia en el siglo 13
Una más suave forma de Textura se desarrolló en Italia y pronto devino importante en el sur
de Europa durante el siglo 15: el tipo Rotunda. Característico de este tipo son los finales
rectangulares de sus remates, las curvas simples y las líneas angulares.
Fig. 2: Rotunda, escrita en Italia durante el siglo 15
Durante el Renacimiento algunos humanistas de Florencia diseñaron la Humanista Minúscula,
combinando las letras mayúsculas de las inscripciones clásicas romanas y la
Minúscula Carolingia. Alrededor del siglo 15 esta fuente se desarrolló en el tipo Antigua, y
pronto devino muy importante a causa de su aplicación en la literatura vaticana.
Fig. 3: Minúscula Humanística, escrita en Italia durante el siglo 15
En Alemania, al comienzo del siglo 16, Textura fue preferida para libros litúrgicos, la
literatura jurídica fue escrita en Rotunda, mientras que las fuentes Antigua fueron usadas para
la literatura científica latina. Diferentes versiones regionales de Gótica Bastarda fueron
usadas para textos escritos en alemán o en otros idiomas extranjeros. Inglés, Francés, Checo,
Holandés) Comparada con otras fuentes góticas, los tipos Bastarda lucían más ornamentos y
trazos curvos, introducidos para mejorar la legibilidad y permitir una escritura eficiente.
Fig. 4: Bastarda Francesa del siglo 15
Cuando Gutenberg inventó sus letras impresas, trató de imitar a las fuentes góticas en orden
de ser capaz de competir con los bellos manuscritos de su tiempo. Por lo tanto, los tipos
Textura, y tambien Rotunda y Bastarda, se encontraban en los libros impresos
de aquel tiempo.
Fig. 5: Textura de la Biblia de Gutenberg, 1455
Cerca de 1481 otro tipo apareció: el Schwabacher. Uno de las llamativas características de esta
tipografía fue el superíndice "e", usado para el diseño de umlauts (Ä, ä, Ö, ö, Ü, ü); guiones y
tildes sobre las letras fueron usadas para indicar abreviaciones.
La Schwabacher fue usada en la biblia alemana de Martín Lutero.
La mayoría de los libros impresos en Bavaria (sur de Alemania) hasta el siglo 19, usaron
el tipo Schwabacher.
Fig. 6: Schwabacher impreso del siglo 16
Para demostrar su poder, el emperador alemán Maximiliano (reinó de 1493 a 1519) decidió
establecer una espléndida biblioteca de libros impresos. Maximiliano fue un hombre de medievales,
caballerescos ideales, y al mismo tiempo un hombre de la nueva era en su patronazgo de
la ciencia, el humanismo y las artes. Este contraste se refleja en su decisión de basarse en
la moderna tecnología de la imprenta de Gutenberg, rechazando la aplicación de la tipografía -
"humanista" - Antigua, así como el tipo Schwabacher común. Por lo tanto, Maximiliano
ordenó que una nueva tipografía basada en las fuentes tradicionales "alemanas" tendría
que crearse para sus propósitos.
Esta tipografía, conocida como Fraktur, fue diseñada
por el calígrafo Leonhard Wagner.
Fig. 7: Libro de oraciones de Maximiliano, Fraktur 1514
El gran suceso de la tipografía Fraktur se debió no tanto a Maximiliano (sólo cuatro de sus
ediciones planeadas fueron completadas), sino a la adopción de este tipo de fuente por el artista
del Renacimiento Alberto Durero, y por el movimiento reformista. Siendo el símbolo del
protestantismo y la conciencia nacional, la Fraktur se convirtió en la fuente tipográfica más
importante de Alemania, y pronto se volvió popular también en los países vecinos y el Sur y
Este de Europa, así como en Escandinavia.
Muchas nuevas versiones de Fraktur se crearon en el siglo 20, algunas de ellos están
asociadas con el "Dritte Reich", tal como fue abusada por la ideología nazi. Como Fraktur
se había vuelto una barrera para la comunicación, Hitler mismo la abolió en 1941,
declarando a la tipografía oficialmente como "no germánica".
Autora: Birgit Stehno - Fuente: METAe Newsletter