Había una vez un hombre sabio cuyo burro nunca comía de la cosecha de otras personas.
Éste servía completamente a su amo,
porque el hombre se había convertido en alguien tan elevado que incluso el burro se elevó con él.
Lo que tú haces afecta a todos los que te rodean.
Cuando creces, tus hijos, tu cónyuge, e incluso tus mascotas crecen contigo.
Lo contrario también es cierto. Cuando tú caes, los afectas a todos.