Una de las fechas claves de la historia cubana más manipulada por la prensa al servicio de la mafia miamense, es el 20 de mayo de 1902: la fecha que ellos celebran como "día de la independencia", la fecha en que Bush hacia los más celebrados shows de acercamiento a la más rancia -no por aristocrátia, si no por podrida- caterva de anquilosados siquitrillados, al más puro estilo de Vigilia Mambisa. Pero leamos qué tiene que decirnos sobre esta "celebración" un periodista de la Radio Web de Artemisa:
El 20 de mayo de 1902
Por Rommell González Cabrera <rcabrera@cmad.icrt.cu>
Este día comenzó un nuevo período en la historia de Cuba. Ese día se instaura la República neocolonial cuyas características principales fueron la total entrega de los principales renglones económicos del país al capital extranjero, principalmente de Estados Unidos, la corrupción político administrativa de las clases en el poder, le explotación desmedida del pueblo y la persecución constante de los grupos progresistas.
Ese tipo de sociedad, que duraría poco más de 57 años, no era la deseada por los cubanos. No era esa la Cuba el país por el que tanto habían luchado desde que el 10 de octubre de 1868 Carlos Manuel de Céspedes liberó a sus esclavos y se lanzó a la guerra por la independencia total de la isla. Tampoco fue la sociedad ideada por José Martí para instaurarse tras la victoria sobre el coloniaje español.
La etapa conocida en la historia de Cuba como seudorrepública nació de la obsesión anexionista de Estados Unidos. La Fruta Madura, como llamaran a la Isla, fue de ellos sí, pero desde el 20 de mayo de 1902 hasta el primero de enero de 1959.
Las bases de esta seudorrepública se encuentran en período de ocupación militar norteamericana en Cuba (1898 – 1902). En estos cuatro años, la administración estadounidense impulsó el proceso de penetración de capitales en los rubros estratégicos y creó estructuras jurídicas e institucionales que ayudarían a su consolidación y permanencia.
En lo político – ideológico estableció bases jurídicas que garantizarían su supervisión sobre Cuba; apuntaló en el poder a la oligarquía interesada en el desarrollo económico dependiente; alentó las contradicciones sociopolíticas existentes en el campo revolucionario, y se esforzó por deformar la conciencia nacional.
Cuando ocurre el traspaso de poderes aquel 20 de mayo de 1902, la suerte de Cuba estaba echada. La nueva República nació con una Constitución aprobada un año antes a la cual se le adicionó la Enmienda Platt, documento legal que autorizaba la intervención norteamericana en los asuntos internos de la Isla.
Pero, si bien la suerte de Cuba estaba echada en el orden económico y político, no mermó el espíritu revolucionario de sus hijos. Las ideas independentistas continuarían propagándose durante todo ese período hasta llegar al verdadero triunfo el primero de enero de 1959, y comenzar la construcción de la sociedad a la cual aspiraba José Martí, “de todos y para el bien de todos”.
http://www.artemisaradioweb.cu/Rese%F1as/rese%F1a%201200510.htm
Imagen agregada: Bajando la bandera americana en el Morro el 20 de mayo de 1902
Véase también:
20 de mayo: una afrenta al pueblo cubano / Pedro Etcheverry y José Luis Méndez [Los autores son especialistas del Centro de Investigaciones Históricas de la Seguridad del Estado (CIHSE)].
http://www.prensa-latina.cu/index.php?option=com_content&task=view&id=190086&Itemid=1