En 1961 el presidente saliente Dwight Eisenhower pronunció un discurso de despedida y una famosa advertencia. En aquella ocasión previno sobre el poder desmedido del complejo militar-industrial”. Según uno de sus más importantes biógrafos, Geoffrey Perret, el borrador del discurso preparado por Eisenhower contenía la frase “complejo militar-industrial-congresional” para marcar el papel negativo que desempeñaba el Congreso como correa de transmisión del poder de la industria militar.