El ataque de Estados Unidos contra el complejo de Osama Bin Laden el 1 de mayo violó múltiples normas elementales del derecho internacional, empezando por la invasión de territorio paquistaní. Al parecer no hubo intento alguno de aprehender a la víctima desarmada, como pudieron hacer los 79 soldados que no encontraron prácticamente oposición en el ataque.