Mañana por la mañana, al soldado de primera clase Bradley Manning le obligarán a permanecer desnudo mientras pasan lista, como cada día, en la base de marines estadounidense en Quantico, Virginia, donde se encuentra recluido con múltiples cargos, incluyendo “ayudar al enemigo”, por su supuesto papel en la filtración a WikiLeaks de decenas de miles de archivos reservados del gobierno estadounidense.