Cuando hablamos de “medios digitales”, debemos analizar de entrada el soporte tecnológico del que dependen orgánicamente y las determinaciones que ese soporte introduce en nuestra manera de abordar y organizar los datos -y nuestra propia conciencia de los mismos. Lo primero que hay que afirmar, contra los que insisten en su neutralidad, es la “autonomía” de los objetos, también o sobre todo de los soportes tecnológicos.