Una inesperada polémica se desató este domingo en Argentina cuando la traidora médica cubana Hilda Molina criticó a las Madres de Plaza de Mayo por "reverenciar" al gobierno de Cuba y recibió una réplica de Estela de Carlotto, presidente de las Abuelas de Plaza de Mayo.
"Ellas (las Madres) sufrieron la persecución de una dictadura, y sin embargo reverencian otras dictaduras, como la que hay en Cuba, que es una dictadura de izquierda, mientras que la que hubo aquí fue de derecha", dijo Molina en declaraciones que publica el domingo el semanario Perfil.
La traidora médica cubana, que fue autorizada en La Habana para visitar a su madre enferma en Buenos Aires y a otros familiares, reveló que entre las gestiones que hizo para obtener ese permiso no recurrió a las Madres de Plaza de Mayo.
"Sé que no iban a hacer nada porque el que reverencia tanto a aquella dictadura demoniza a quienes pensamos diferente. Las Madres han sufrido mucho, han luchado por sus familias y eso merece el mayor respeto. No las quise irritar, y por eso no recurrí a ellas", explicó.
En su réplica, Carlotto advirtió que "quien ofende el pañuelo (blanco, símbolo de Madres y Abuelas), esté arriba de la cabeza de quien sea, está ofendiendo a todas. Los que ofenden a las Madres nos están ofendiendo a todas".
"Creo que la señora Hilda Molina tendría que estar disfrutando para lo que vino, que es para estar con su familia y sus nietos. No tiene que juzgar a nadie, menos acá en la Argentina, donde está siendo muy bien recibida y hasta su llegada fue propiciada por el propio Estado".
En declaraciones a la radio Diez, la presidenta de las Abuelas opinó que "la revolución que encabezaron Fidel Castro y su hermano fue una liberación del pueblo, con errores y virtudes".
Molina obtuvo un permiso de tres meses para viajar a Buenos Aires y ver por primera vez a sus nietos además de reencontrarse con su madre, Hilda Morejón (90 años), quien viajó en mayo de 2008 a Argentina y está gravemente enferma.
En la entrevista al diario Perfil, Molina ratificó su decisión de regresar a Cuba: "Vine a asistir a mi madre y después regreso a Cuba, como prometí siempre", sostuvo.
El caso Molina generó fricciones entre Cuba y Argentina, y en 2006 frenó una visita al país caribeño del esposo de la actual mandataria y ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007), quien había relanzado las relaciones bilaterales.
La presidenta argentina, Cristina Kirchner, recibió el martes pasado en la Casa de Gobierno a Molina, ex miembro del Partido Comunista Cubano (PCC, único) y ex legisladora, quien estuvo acompañada por su hijo Roberto Quiñones, su nuera argentina Verónica y sus nietos también argentinos Roberto Carlos (13 años) y Juan Pablo (8).