El Gobierno de Crimea anunció hoy que ha asumido el control sobre la seguridad de la península ucraniana, al tiempo que dio un ultimátum a los últimos oficiales del Ejército leales a Kiev para que se subordinen a las autoridades de la república.
“La situación se encuentra bajo el control absoluto del gobierno de la república autónoma de Crimea. Nada amenaza la vida de los crimeos. Coordinamos todas nuestras actividades con la Flota rusa del mar Negro, pero, a día de hoy, ya no necesitamos ayuda física”, aseguró Serguéi Axiónov, primer ministro crimeo, en rueda de prensa.
Los miles de efectivos que integran las milicias de autodefensa, ayudadas por los Berkut, el destacamento antidisturbios desarticulado por las nuevas autoridades de Kiev, controlan todas las salidas y entradas a Crimea.
Axiónov no llegó a mencionar a las tropas y comandos rusos desplegados por la república y que cercan las bases de las Fuerzas Armadas ucranianas, pero si reconoció que el presidente ruso, Vladímir Putin, respondió positivamente a su solicitud de ayuda.
“Me dirigí al presidente ruso con una petición de ayuda con el fin de estabilizar la situación y garantizar la seguridad de la población (…) Y esa ayuda llegó”, dijo.
Axiónov, cuya legitimidad no reconoce ni Kiev ni la minoría ucraniana y tártara de Crimea, se mostró convencido de que en breve todas las unidades militares se subordinarán a las nuevas autoridades locales.
“En estos momentos tienen lugar negociaciones con los jefes de las unidades militares emplazadas en Crimea, que deben cumplir hoy con la orden de someterse a las autoridades de la república autónoma de Crimea”, resaltó en Simferópol, la capital de este enclave.
El líder prorruso aseguró que aquellos soldados que no quieran servir a Crimea podrán abandonar las filas del Ejército, pero no se verán privados de sus salarios o pensiones.
“Me dirijo a los soldados. No os resistáis. Subordinaros a las leyes vigentes en la república de Crimea. Jurasteis lealtad a un país que ya no existe. El que deje su puesto será recibido con aplausos. No humillamos a nadie. Nadie será represaliado. Lo garantizo”, aseguró.
En cambio, advirtió que “contra aquellos jefes de unidades militares que no se subordinen a las autoridades de Crimea se incoarán expedientes penales”.
“Se acabaron las bromas. En estos momentos, todas las unidades militares o están controladas o bloqueadas por las fuerzas de autodefensa que cuentan con miles de efectivos. Desde el punto de vista moral, todos se han pasado ya a nuestro bando”, resaltó y cifró en 5.500 los soldados ucranianos que se han enrolado ya en las milicias populares.
En lo que se refiere a los buques de la Armada ucraniana anclados en el puerto de Sebastopol frente a la Flota rusa del mar Negro, Axiónov proclamó que pronto entrarán a formar parte de la Marina de Guerra de Crimea.
Aunque el primer ministro crimeo negó que queden focos de resistencia, en la base aérea de Belbek, en las afueras de Sebastopol, los soldados leales a Kiev consiguieron recuperar hoy en parte la pista del aeródromo, al avanzar en son de paz y ondeando dos grandes banderas, una ucraniana y una de la desaparecida Unión Soviética.
Los militares rusos (sin distintivo) les recibieron con disparos al aire, según puede verse en un vídeo colgado por la agencia local Unian, aunque tras unas breves negociaciones permitieron a los ucranianos tomar posiciones en la base.
Por otra parte, Axiónov comentó la posibilidad de que el referéndum de autonomía convocado para el 30 de marzo se adelante e incluso que se modifique la pregunta inicial: íApoya usted la autodeterminación de Crimea en el seno de Ucrania sobre la base de los acuerdos y tratados
internacionales?.
“Trataremos de conocer la voluntad de los crimeos cuanto antes para actuar conforme a ella. Crimea no reconoce a las autoridades de Kiev como representantes legítimos del Estado ucraniano. Crimea comienza una nueva vida”, dijo.
Y, con respecto a las aspiraciones de la ciudad de Sebastopol de unirse a la nueva Crimea, aseguró que “los crimeos recibirán con los brazos abiertos a todos los territorios que se le quieran unir”.
También adelantó que una delegación del Gobierno ruso llega hoy a Simferópol para estudiar las propuestas de las autoridades locales en materia de asistencia financiera e inversión en infraestructuras, y agregó que en breve su Gobierno decidirá sobre el ingreso en la Unión Aduanera liderada por Rusia.
“Junto a Rusia estoy convencido de que podremos garantizar el orden, la seguridad, la tranquilidad y el bienestar de los habitantes de Crimea”, afirmó.
(Tomado de EFE)