Si Rusia en algún momento respondiera a las sanciones impuestas por Occidente, las compañías estadounidenses y europeas perderían miles de millones de dólares, advierte un artículo publicado en el portal Bloomberg.
Las declaraciones del presidente ruso, Vladímir Putin, sobre posibles respuestas a las sanciones de Occidente, impuestas en relación con la crisis ucraniana, crean las premisas para el inicio de una "
guerra económica" cuyas consecuencias pueden ser dañinas para las empresas estadounidenses y europeas, según informa
Bloomberg.
Aunque Putin dijo que Rusia no quería recurrir a medidas de respuesta, no excluyó la posibilidad de tomarlas en un futuro. Entonces los inversores extranjeros podrían perder miles de millones de dólares, especialmente en la industria petrolera.
La agencia señala que entre los más afectados estaría la compañía estadounidense ExxonMobil, que tiene varios proyectos con la rusa Rosneft. "Seis funcionarios estadounidenses y europeos han contado que están estudiando los riesgos potenciales para las
economías de sus países si Putin llega a tomar medidas de respuesta", se señala en el artículo.
Al mismo tiempo, según la agencia, si Rusia respondiera a las sanciones esto inevitablemente afectaría a su propia economía. "Sin embargo, la Federación de Rusia siempre ha estado orgullosa de su capacidad para afrontar las dificultades".
Los posibles problemas económicos no detienen a la
UE a la hora de plantear nuevas sanciones contra Rusia. No obstante, algunos países de la unión temen que las consecuencias puedan afectar a varios sectores de sus economías: Reino Unido se preocupa por la esfera financiera, Francia por la venta de material militar e Italia por la de productos de lujo.