El gobierno del nuevo presidente de Argentina, Mauricio Macri, se enfrenta a la primera huelga nacional. El paro, lanzado por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), se centra en el rechazo a los despidos masivos de trabajadores estatales, pero también exige mejoras salariales y de las condiciones de trabajo.
La huelga incluye movilizaciones en las provincias de Santa Fe, Córdoba, Río Negro, Entre Ríos y Santa Cruz, entre otras, así como una marcha a la Plaza de Mayo, el epicentro de las protestas.