El defensor del Pueblo, Tareck William Saab, propuso este miércoles a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) dar rango constitucional a la prohibición de delitos de odio en la Patria de Bolívar.
“ Que coloque los delitos de odio y los prohíba y tenga rango constitucional. Vamos a ser fundadores de ellos porque aún no existen en ninguna constitución”, dijo.
Durante su participación en el programa Con Amorin, que transmite Venezolana de Televisión , aseguró que la Constituyente tendrá la oportunidad de avanzar en esta materia de violación a los derechos humanos, que puede ser cometido por cualquier individuo o agente del Estado.
William Saab también condenó los cuatro “crímenes de odio” ocurridos en el país producto de las manifestaciones convocadas por la oposición venezolana, como el caso del joven Orlando Figuera, quien fue apuñalado, golpeado y quemado vivo el 20 de mayo en Altamira, municipio Chacao del estado Miranda.
Indicó que este hecho conmocionó al mundo y es repugnante que algunos sectores quieran minimizarlo tras su fallecimiento, señalando que no se pude agredir a ninguna persona por “razones de color, sexo, religión, orientación sexual, funcionario público, motivo político. Está prohibido, está tipificado”.
MANIFESTACIONES VIOLENTAS
Asimismo, mencionó que la Defensoría del Pueblo se encuentra haciendo seguimiento a todos los sucesos violentos ocurridos en el país durante las últimas semanas, agregando que hasta la fecha hay 57 fallecidos, de los cuales la mayoría eran personas que no manifestaban pero estaban cerca de las concentraciones.
También acotó que los delitos cometidos por los cuerpos de seguridad han sido revisados y sancionados.
En este sentido, el Defensor manifestó que en el informe de la institución sobre los sucesos ocurridos en el país hace recomendaciones a los cuerpos de seguridad del Estado para evitar el uso excesivo de la fuerza, así como el rechazo a la utilización de menores de edad en manifestaciones violentas, el apoyo a las manifestaciones pacíficas sin armas caseras y un llamado a la población a abstenerse de difundir mensajes de odio.