Venezuela había hecho historia con el mero hecho de haber llegado a la final de una Copa del Mundo y, a los 35 minutos, el delantero inglés Dominic Calvert-Lewin anotó el único gol del partido. La vinotinto tuvo varias oportunidades de empatar el marcador pero no llegó a concretar la anotación que forzara la prórroga.