El Gobierno de China manifestó este lunes su rechazo a las sanciones impuestas por parte de la Unión Europea (UE) contra Rusia y señaló que ello "puede ocasionar nuevos y complejos problemas".
Durante una rueda de prensa, el ministro de Relaciones Exteriores de ese país, Qin Gang, dijo que "las sanciones no ayudan a resolver los problemas subyacentes" entre Rusia y Ucrania, cuyo Gobierno ha denunciado la presunta participación de Moscú en el conflicto interno,
Petro Poroshenko mantiene actualmente una operación militar contra la población que se le opone, en especial en el sureste del país. Al respecto, Moscú ha rechazado estas acciones que han dejado más de 2.000 personas asesinadas.
El diplomático chino insistió en que "una solución política es la única salida" al conflicto interno ucraniano, por lo que instó a la UE a "evitar nuevas medidas que puedan llevar a escalada de las tensiones".
Las declaraciones de Gang surgen luego que el sábado el presidente francés, François Hollande, afirmara que el Consejo Europeo de Bruselas decidirá aumentar las sanciones a Rusia ante la situación de Ucrania, de acuerdo con Efe.
Más temprano, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, denunció que el plan de paz propuesto por de Kiev busca la erradicación de los detractores del Gobierno.
Lavrov pidió al mundo ejercer presiones sobre Poroshenko para evitar los ataques militares contra la población civil.
El pasado 29 de agosto,Estados Unidos impuso nuevas sanciones contra 25 bancos de Rusia, así como a negocios e individuos de ese país. Las nuevas medidas prohíben a organizaciones, empresas e individuos estadounidenses cooperación alguna con las empresas y personas sancionadas
Posición similar han asumido la Unión Europea, Canadá, Australia y Japón, entre otros países, que han impuesto sanciones económicas que afectan la industria petrolera y de defensa de Rusia, productos de doble uso y tecnologías sensibles, para castigar la adhesión, mediante un referendo, de Crimea —antes perteneciente a Ucrania— a la Federación Rusa.
Pese a ello, la Federación Rusa prevé aumentar las importaciones de productos alimentarios desde Ecuador, Chile, Brasil y Argentina luego que se prohibiera las importaciones a Estados Unidos, la Unión Europea y los países que se sumaron a las sanciones económicas que pretendían atacar la economía de Rusia.
AVN