Poema de Teresita Capote Camacho,
embajadora de Cuba en Bulgaria, conmotivo del traslado a
Cuba de los restos del Ché
Aquí estamos contigo,
soldado de la aurora,
honrando tu memoria
desde la isla ardiente
que te amo como a un hijo
que amaste como propia
¿No es necesario acaso
estar lleno de amor
para arriesgar la vida
en una playa ajena
defendiendo una idea?
Esa misma que luego
no dejo que murieras
porque esa bala artera
que te mató en Higueras
te llevo por el mundo
convertido en bandera!!!!!!!
¿No es necesario acaso
estar lleno de amor
para dejarlo todo
sin pedir nada a cambio?
¡Cuánta fuerza moral
cuánto valor sin nombre
para poder gritarle
al sucio mercenario:
¡Disparen y no tiemblen
que van a matar a un hombre!
Se equivocan aquellos
que quieren reducirte
a una simple leyenda
a una suerte de mito,
a una idea en abstracto.
Tu mensaje es ahora
más vigente que nunca
más fuerte y necesario
más fiel y solidario
más urgente que antaño.
Con el asma vencida,
tu boina y tu hidalguía
en esa Santa Clara
donde duermen tus restos
En la isla valiente
que no olvida a sus muertos,
seguirás siendo pauta,
seguirás siendo guía
para impedir que pueda
la libertad, un día,
-esa piedra preciosa
que te costó la vida-
volverse mercancía.
Desde donde nos mires
bendícenos a todos
tus hermanos mortales
combatientes eternos
que nunca olvidaremos
tu fértil pensamiento
que fieles a tu ejemplo
y armados de confianza
no podrán convertirnos
en anónimos mártires
de la desesperanza.
Tu presencia, Guevara,
será por siempre eterna,
y como primavera
que siempre se renueva,
seguirá refulgiendo
con destellos impares
la estrella que te hiciera
Comandante del pueblo,
apóstol combatiente,
forjador de victorias
que los pobres presienten
como lava encendida
en el subsuelo ardiente.
Tu mortal osamenta
que recibió caliente,
cubana sepultura,
descansa ya sin miedo
a que tu idea muera
porque tú eres de aquellos
que no se mueren nunca
Porque tú, Ché Guevara,
renaces cada día
porque tú eres la vida!!!
Obra plástica Espiritu de luz
OBRA DE Yudit Vidal Faife.